Policías huyen tras operativo en Ario de Rosales

Abandonaron patrullas y armas antes de que llegara la FGE; los investigan por homicidio.

En un hecho inédito, todos los elementos de la policía municipal de Ario de Rosales, Michoacán, huyeron este jueves 27 de noviembre tras enterarse de un operativo sorpresa de la Fiscalía General del Estado (FGE). La acción buscaba ejecutar órdenes de aprehensión por un caso de homicidio doloso, pero los oficiales escaparon antes de que los agentes estatales arribaran.

El operativo, encabezado por personal de las áreas de Mandamientos Judiciales y Homicidios de la FGE, pretendía detener a varios uniformados señalados por su presunta participación en el asesinato de una pareja, ocurrido el pasado 5 de octubre. Sin embargo, fuentes indican que los elementos fueron alertados con anticipación y abandonaron patrullas, armamento y equipo táctico en la vía pública.

La comandancia municipal fue cercada por elementos del Ejército, la Guardia Nacional y policías estatales, mientras se aseguraban las instalaciones y el material abandonado. Hasta el momento, no se ha confirmado si hay detenidos ni se ha emitido una declaración oficial por parte de la presidenta municipal, Karla Yohana Mendoza Bermúdez (PVEM), quien no se encontraba en el municipio al momento del operativo.

Cabe recordar que desde el 15 de octubre, todos los policías municipales de Ario de Rosales ya estaban bajo investigación por su posible vínculo con el doble homicidio. En ese entonces, los 20 elementos fueron trasladados a Morelia a rendir declaración, aunque días después se reincorporaron a sus funciones.

La situación se agravó cuando 18 policías del municipio vecino Salvador Escalante fueron detenidos por presuntos nexos con el mismo caso, lo que aumentó las sospechas sobre una posible colaboración entre policías municipales y grupos del crimen organizado que operan en la región.

El hecho deja sin fuerza policial al municipio de Ario de Rosales y plantea dudas sobre la penetración del crimen en las corporaciones locales. Las investigaciones siguen en curso.

Fuentes: Proceso, El País, Aristegui Noticias