Científicos de La Laguna buscan crear abejas más resistentes al clima extremo y pesticidas
- Redacción

- 4 dic
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Un grupo de investigadores en La Laguna está desarrollando un ambicioso proyecto para fortalecer genéticamente a las abejas de la región y ayudar a los apicultores locales a enfrentar las crisis provocadas por el cambio climático, las sequías y el uso de agroquímicos.
Bajo la coordinación de Saúl Santana Espinoza, del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), el proyecto busca crear un ecotipo de abeja adaptado a las duras condiciones del norte de Coahuila. Este ecotipo sería una variante genéticamente diferenciada de la especie Apis mellifera, desarrollada especialmente para sobrevivir en ecosistemas áridos.

Con un financiamiento inicial de 150 mil pesos del FONCYT, el equipo multidisciplinario —integrado por científicos del INIFAP, la UJED y la Universidad Politécnica de la Región Laguna— trabaja en mejorar características como la resistencia al calor, la producción de miel y el comportamiento dentro de las colmenas.
La iniciativa surge luego de que, entre 2016 y 2017, desapareciera hasta el 80% de las abejas en la región, una catástrofe apícola atribuida a múltiples factores, como la sequía, la pérdida de flora y el uso de pesticidas con neonicotinoides. La falta de abejas reinas adaptadas al clima local agravó aún más la situación.
Karen Fraire Galindo, investigadora del INIFAP, explicó que muchas abejas reinas provienen de regiones con climas muy diferentes, como Cuernavaca, y no logran adaptarse. “Queremos que esta investigación no se quede solo en laboratorio, sino que llegue directamente a los apicultores”, señaló.

Además de los estudios genéticos, el equipo analiza el impacto de la temperatura sobre el comportamiento de las abejas en las colmenas y la calidad de los productos apícolas. Se espera que los primeros resultados se presenten en un año, aunque el mejoramiento genético requiere un trabajo de seguimiento a largo plazo.
Jorge Alonso Maldonado Jáquez, otro de los investigadores del proyecto, subraya que el cambio climático y la falta de organización entre los productores son dos de los mayores retos para el sector apícola. También apunta que la iniciativa podría servir como modelo para otras zonas áridas del país.
Fuentes:
Milenio
INIFAP
COECYT Coahuila







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